
Más de 30 delegados sindicales de las antiguas
cajas de ahorro, reconvertidas en bancos, se han concentrado hoy frente a una oficina de la entidad
BMN en protesta por la
actitud “inmovilista” de la patronal en la negociación del
nuevo convenio colectivo, que afecta en Baleares a más de 2.200 trabajadores.
La concentración bajo el lema ‘Por un convenio sin recortes’ se ha realizado también en otras ciudades españolas y se enmarca en la movilización iniciada por los sindicatos para presionar a la patronal y conseguir un convenio “digno” que no implique la pérdida de derechos laborales de los trabajadores del sector ahorro.
El responsable de banca de UGT, Cristóbal Marqués, ha explicado que la patronal solo está dispuesta a firmar el nuevo convenio colectivo “si se traspasa parte del sueldo fijo de los trabajadores a sueldo variable en función de objetivos, se flexibiliza la jornada laboral para que pueda dejar de ser continua, se facilitan las prolongaciones ilegales de jornada, y se incrementa la movilidad geográfica”.
Marqués ha añadido que son “recortes de derechos que los trabajadores del sector no están dispuestos a asumir”.